miércoles, 7 de octubre de 2009

DONOSO Y EL CINE


DONOSO Y EL CINE

por Pamela Biénzobas

El 5 de Octubre, José Donoso cumpliriá 75 años de una vida consagrada a la literatura, pero que también estuvo marcada por sus eternos encuentros y desencuentros con otro arte: el cine.

Como un ritual, todos los domingos José Donoso y su esposa María Pilar se juntaban con Carlos Cerda y su señora para ir a la función de vermouth, y de ahí a cenar juntos. Donoso amaba el cine, aunque no se definía como un cinéfilo. Era "un novelista ciento por ciento", como lo recuerda su amigo y colega, y el cine jamás pasó de ser algo secundario para él.

Sin embargo, su vida, su obra y sus diálogos han quedado plasmados en celuloide. Porque ha sido el protagonista y tema principal de documentales ( Pepe Donoso y Donoso por Donoso, de Carlos Flores, y Encuentro con José Donoso, de Benjamín Galemiri); muchos de sus cuentos y novelas han sido llevados al cine o al video, y si bien Cerda asegura que a Donoso no le gustaba escribir guiones, el cineasta Silvio Caiozzi aún se impresiona al recordar la velocidad y naturalidad con que escribía diálogos "prácticamente perfectos".

"Era una ametralladora en la máquina de escribir. Me sorprendía mucho que no parara y pensara un poco. Era como si tuviese grabado en su cerebro la forma como habla tal o cual personaje", recuerda Caiozzi, quien espera tener lista "Coronación" para diciembre. Y aunque no alcanzó a trabajar el proyecto con Donoso debido a la delicada salud del escritor, de algún modo sintió que no estaba solo.

"Me puse a hacer el guión, y juro que pocas veces en mi vida he estado tan inspirado. Cuando lo terminé quedé con la sensación de que Pepe me había ayudado", dice entre risas, apuntando al cielo.

Es que desde su primer encuentro Caiozzi y Donoso estuvieron haciendo planes para trabajar juntos. En 1979, durante el Festival de Huelva, España, tras ver Julio comienza en Julio, Donoso se acercó para proponerle hacer una película con Este domingo, pero al director le pareció demasiado similar a Julio..., y el contacto se perdió. "No nos volvimos a ver hasta que me llamaron de Ictus para dirigir Historia de un roble solo (nouvelle incluida en Cuatro para Delfina) para la televisión". Al ver el resultado, Donoso volvió a sugerir la idea de llevar una historia juntos al cine.

Los primeros cuentos que el escritor le mostró no lograron convencer visualmente a Caiozzi. "De repente me llama y me dice 'tengo una idea. Fui a Valparaíso y se me ocurrió una cosa.'" Esta vez, el director visualizó de inmediato a los tres personajes creados por Donoso, y en cosa de un mes estaba listo el guión de La luna en el espejo.

Luego del trabajo conjunto, para Caiozzi una de las experiencias más maravillosas que ha tenido, vino la filmación y la eterna post-producción: el director apenas podía dedicar los fines de semana a la película, que demoró unos tres años en estar lista. A pesar de las dificultades, jamás pensó abandonar. Y fue gracias a esa perseverancia que el proyecto no terminó como tantas otras de las incursiones del Premio Nacional de Literatura en el cine: en nada.

Debido a la calidad de su obra, Donoso siempre fue buscado por el cine, aunque el 90% de los proyectos se frustrara, explica Cerda, quien asegura que "los que prosperaron se deben en gran parte al talento y perseverancia de Silvio Caiozzi."

De todos modos, de todas las veces que se vendieron los derechos de sus novelas para el cine, hubo algunas que efectivamente llegaron a hacerse. De hecho, ésta no es la primera adaptación de Coronación. Anteriormente el mexicano Sergio Olhovit realizó una versión que Donoso nunca vió, pero que a juicio de su amigo Carlos Fuentes es la peor película que se ha hecho en su país. También en México se realizó una serie de televisión basada en Este domingo.. Y en Chile, un grupo de estudiantes dirigió un video sobre el cuento Santelices.

Claro que los esfuerzos que no llegaron a concretarse fueron bastante más. Entre muchos otros, Anthony Quinn compró los derechos de Casa de Campo, pero la película jamás se filmó. Carlos Flores, al igual que el español Eduardo Lurcay (productor de Tristana), quiso adaptar Gaspar de la noche, una de las Tres novelitas burguesas. Federico Fellini habría sido otro de los interesados en El obsceno pájaro de la noche, la primera novela de Donoso que su gran amigo Luis Buñuel quiso filmar. El otro proyecto eternamente frustrado del español -y el gran sueño incumplido de José Donoso- fue El lugar sin límites, que finalmente llevó a cabo el mexicano Arturo Ripstein, con guión de manuel Puig.

Fue también El obsceno pájaro de la noche el libro que llamó la atención de Michelangelo Antonioni, quien contactó al escritor para decirle que si bien la novela no estaba dentro de su línea, le interesaba mucho su estilo, y le encargó un guión. Donoso se sentó entusiasmadísimo a escribir, pero al poco tiempo este encuentro con el cine -que más bien eran desencuentros, como dice Carlos Cerda- terminó con una llamada del narrador a Antonioni para informarle que no podía hacer el trabajo. Tras escribir las primeras páginas de la historia, Donoso se dió cuenta de que no estaba escribiendo un guión, sino una novela. Cuatro años después estaba lista Casa de campo, y el cineasta italiano se quedó sin su película.

Entre las incursiones curiosas de Donoso en el área se encuentra un guión sobre los últimos días de Rimbaud en África, escrito junto a Leonard Schrader (guionista de Mishima y El beso de la mujer araña).Lo más cerca que estuvo de realizarse fue en la forma de una comedia musical protagonizada por la cantante Patti Smith."Hagan lo que quieran, pero sin mí", habría sido la respuesta del novelista. Claro que finalmente nadie hizo nada.

Otro proyecto inconcluso fue la teleserie que José Donoso comenzó a escribir para Televisa hacia el final de su vida. Cerda recuerda que su amigo asumió el trabajo para poder afrontar los costos de su enfermedad, pero ésta lo venció, antes de terminar el guión. Y antes de poder concretar un secreto anhelo: dirigir. Hace 20 años filmó un documental sobre Picasso en españa, pero la película se perdió antes de montarla siquiera.

Más adelante, la idea permaneció. "Tendría un técnico al lado mío que me aconsejara. Pero me encantaría, creo que sería algo apasionante", confesó en una entrevista a la desaparecida revista Enfoque. "Creo que el montaje es lo que más me interesa y es la parte más creativa, es lo que le da ritmo, la forma. Es la parte más parecida a la literatura, es lo que permite que uno pueda 'leer' la película.".



Rocinante Oct.1999